sábado, 28 de marzo de 2009

Lunares

...Eterno destino son los caminos:
Savia y cáliz de mis pasos.
No quiero tropezar nunca más.
Ya no te espero. Te tengo...

Quisiera verte bailar,
quisiera verte soñar…

Columpias tu cabeza, no sufras más,
umbilical.

Gesticulas tus ramas
no poses más, que la luna ovulará

Tienes savia en tus ojos,
tus labios, los frutos déjalos madurar.

Quisiera ser tu piel,
acariciar tu vientre

sal...

Letra y Música: Arpad Debreczeni del disco "Apaguen la luz..."
En la foto: Arpad Debreczeni. Tomada por Gabriela olivera.

viernes, 27 de marzo de 2009

Segundo día de rodaje: V grado dominante


Ayer, en Jaihuayco, se inició el segundo día de rodaje de “Apaguen la luz…”, el primer corte del disco homónimo de Quimbando, en el que se contó con la presencia de 70 estudiantes del colegio San Francisco de Asís y la colaboración de la radio CEPRA-CEPJA (FM 90.3).

Todo estaba previamente planificado, punto por punto, segundo por segundo. Creo que sería mejor decir que todo estaba “alemanamente” planificado, puesto que Claus, Jana y Amalia se encargaron, ya algunos días antes, de pensar en cómo trabajar con 70 personas.

Cómo podría explicar lo dificultoso que es trabajar con un grupo tan grande. Sería mejor utilizar una analogía.

En la música (especialmente en el jazz) existe un recurso armónico llamado cadencial segundo, quinto, primero (II, V, I) que consiste en la disposición de los grados armónicos que generan distintas sensaciones de tensión. Están pues, una tensión media (II), una tensión máxima (V) y la relajación final o resolución (I). La primera parte de la realización de un video implica una tensión media. En esta parte de lo que uno se preocupa es de pensar, con un grupo minúsculo de gente, las ideas. La segunda, en la que ayer nos encontrábamos, era exactamente un V grado dominante que exige una resolución urgente: ponerle el colchón a alguien que se cae para que no quede lastimado. El sol abrazador y la ausencia total de sombra, en un principio, hicieron que el trabajo se tornara más difícil. Pero la disposición de la gente trabajando no se diezmaba. Es más alguien dijo por allí: “dónde podemos encontrar un lugar sombriento o al menos sombrilineo”.

En sus marcas, listos… ¡fuera!

Como si se tratase de una carrera, todos los miembros de la producción cumplían al pie de la letra las indicaciones del caso. Cuando los estudiantes salieron del colegio se trató de organizarlos en grupos, allí nos encontramos con el primer problema: un grupo de estudiantes se ch’acho, ¡y eso no estaba planificado! Todos empezamos a correr detrás de ellos, pero los compañeros que se quedaron (la mayoría) dijeron: “que importa, así no más lo haremos”. Lo bueno de todo es que, aunque el plan no haya previsto esto, se pudo seguir por un momento sin él. Logramos exitosamente la primera toma. Los estudiantes le pusieron toda la buena onda para seguir.

Era hora de recoger al segundo grupo de estudiantes para que se acoplara a la gran toma. Para que no nos pase nuevamente la fuga de los demás estudiantes en sol menor (puesto que se estaba nublando), entramos en el curso antes de que salgan. Ya allí, les dimos las indicaciones necesarias: ¡dejen sus mochilas en el curso! (en realidad esa fue una sugerencia de uno de sus compañeros).

La gran toma estaba lista a realizarse y así fue. Los estudiantes se sintieron ya parte del asunto. Toda la cuadra de vecinos en sus puertas mirando las escenas. La gente de la radio ayudándonos a organizar. En suma: todo perfecto.

Ya para el final le regalamos un disco a cada uno y nos tomamos un refrigerio en el medio de la calle en la que habíamos hecho la toma. El cielo comenzó a desmoronarse en pequeñas gotitas y luego de habernos esperado toda la tarde llovió, a cantaros, y corríamos como un grupo enorme de niños al medio de esa lluvia. Era la bendición de un día exitoso de trabajo.

Agradecimientos

Agradecemos profundamente a la radio CEPJA-CEPRA por la colaboración para organizar a la gente, a la directiva del barrio, a los vecinos que hicieron de organizadores del tráfico y especialmente a los estudiantes del cuarto grado secundario del colegio San Francisco de Asís, así como también a todos nuestro compañeros de producción.

¡Gracias Jaihuayco!

Salud y gloria a todos ellos….

Quimbando

Fotos de Gabriela Olivera:

1.- Quimbando junto a Daniel Antezana (el Anteke) y los estudiantes del colegio San Francisco de Asís.

2.-El Anteke escapando.

3.- Casi todos los que formaron parte del rodaje.

lunes, 23 de marzo de 2009

La radio y el arte en mi llajta


Jamás olvidaré el día en el que mi padre me regaló ese cassete. Recuerdo que yo chapoteaba descalzo y casi desnudo en medio de los charcos formados por la lluvia que cayó la noche anterior, y en medio de las gotas que salpicaban de mis pisadas vi la enorme figura de mi padre atravesar el portón que unía la calle con la casa. Lo veía entrando con algo de dificultad, pues su cabeza llegaba tan alto que le era imposible no encorvar su cuerpo para cruzar el umbral. Yo me encontraba ya en la carrera hacia su encuentro. Yo debí haber tenido unos cuatro o cinco años.

Él, por esa época, trabajaba muy lejos en un campamento a muchos kilómetros de Oruro, en pleno altiplano, realizando algunas tareas de construcción, no sé de qué. Recuerdo que traía en el bolsillo una mini-casetera, que unos meses antes le había regalado mi abuelo. Veía su antena saliendo del bolsillo de su chamarra. No recuerdo la marca, pero si el cassete que llevaba dentro. Esa radio era la compañía perfecta para la soledad. Mi padre me contó que durante las noches esa pequeña radio, que cabía perfectamente en su bolsillo, era la única distracción que poseía, puesto que, por el frío, nadie quería quedarse fuera de su carpa terminada la jornada de trabajo.

Una vez que mi padre había entrado a descansar, mi madre y yo apretámos el botón de “PLAY”, ese pequeño triangulo que se formaba en medio del “FF” y “REW”, y unos segundos después oíamos el sonido que emitía el aparato. Comenzaba con una canción que decía: “un paisano me contó…” y luego el narrador comenzaba las historias que aun cita mi memoria. Bum. Eso fue todo: caí perdidamente enamorado de ese lenguaje, de esa manera de contar las cosas, de ese formato. Luego, cuando estábamos almorzando, comencé a contarle las historias que oí a mi padre, lo hice con una emoción tan profunda que mi padre me miraba casi riendo y asentía a mis palabras con frases tales como: “Ah… ¿sí?”, “osea que él quería quedarse con todo…” y muchas frases más que no recuerdo con exactitud. Cuando ya no sabía que más contarle (y trataba de aumentarle cosas a la historia para que me siguiera escuchando) mi padre se levantó de la mesa tomo la pequeña radio y saco el cassete diciéndome: “¿te ha gustado no?, tomá te lo regalo, es uno de mis favoritos”.


Escuchaba ese cassete una y otra vez, y lo escuché hasta que la cinta electromagnética, que codificaba la información, se gastó. Y eso que sólo traía dos historias: en el lado “A” había una llamada “la historia de unos llanos donde morían los paisanos” y el lado “B” otra llamada “la historia de Marta y Mamerto y un día de desconcierto” historias de Ignacio López Vigil y María López Vigil. Fueron momentos muy especiales.


Con el paso del tiempo ya tenía una colección de cassetes: tenía cuentos de hadas, historias policiales, de terror, y un largo etc. Y ya no escuchaba sólo historias creadas. Escuchaba junto a mi primo los partidos de futbol, el noticiero y algunos programas musicales. Aun la tele no nos había invadido por completo.


Siempre sentí que en el terror, por ejemplo, la tele era muy obvia, aburrida. El futbol dejo de gustarme cuando lo veía por la tele: me di cuenta que era muy lento. Una vez hice un experimento. Lleve la mini casetera a un partido, y noté que el radialista tenía otra óptica: mientras yo veía un juego lento y trancado en el medio campo, él relataba la final de la copa del mundo, sin embargo era el mismo partido. Es más cerré los ojos y puse la radio sobre mi oreja para ver el partido que relataba el radialista (y eso me costó el enojo de mi padre puesto que había pagado mi entrada).

Pero las circunstancias de la cuales fui parte en mi adolescencia me alejaron abruptamente de la radio. En un mundo urbano alejado de la realidad (puesto que la radio esta siempre más cerca de la realidad) mis intereses cambiaron (además porque la adolescencia tiene los rasgos más absurdos de la historia de cualquier hombre).

Omitiré la parte de mi adolescencia por cuestiones del relato.

Ya joven conocí a Grober Loredo que me fue presentado por Marcelo (compañero en el proyecto musical Quimbando), y para mí fue un hecho trascendental. Hablábamos de todo con él y con Carmen su compañera de vida. Los días enteros no me alcanzaban para contarles todo cuanto había pensado. Pero mientras yo sólo pensaba ellos me empujaban a realizar mis proyectos.
Luego de muchos años de haberlo conocido, a Grober se le ocurrió hacer radio. Bum otra vez. El regreso a mi infancia, el charco, mi padre, el cassete… Luego de haber practicado Grober durante un año en su propia casa (sacaba unos parlantes a la puerta y comenzaba a llamar a los vecinos para que le den sus perspectivas, entrevistaba a artistas y muchas otras cosas más, que casi nadie escuchaba), consiguió por fin un espacio en la radio CEPJA, donde actualmente transmite su programa “arte en la llajta”. Lágrimas brotan de mis ojos al oír su programa. Otra vez la poesía y la música, las historias… el regreso al origen.

Tal fue la emoción que sentí cuando escuche su programa, que comencé a trabajar arduamente para poder adquirir algo de equipo para hacerlo yo también junto a él que había tocado ese rincón olvidado de mi conciencia, aunque yo, por el momento, sigo tratando de encontrar las historias, él las cuenta. Sigo ansioso de trabajar con él.

Los invito a escuchar “Arte en la llajta” para recordar un poco lo que el oído histórico capta sin darnos cuenta. Y los invito también a visitar http://radiokatari.blogspot.com/ donde se encuentran los trabajos de Grober, Alexia, y paola.

Un Abrazo a todos
Mauricio Canedo
Quimbando
Fotos:
1 Algunos miembros del Colectivo Katari junto a Ignacio Lopez Vigil (de izq a der): Bayo Loredo, Grober Loredo, Ignacio Lopez Vigil, Carmen Cardenas, Marcelo arias, Alexia Loredo.
2,3,4 Tomadas de internet tras la búsqueda del tag "radio"

domingo, 22 de marzo de 2009

Apaguen la luz: el video

Queridos amigos, les avisamos que Quimbando se encuentra actualmente realizando el video de “apaguen la luz…” El primer día de rodaje fue ayer sábado 21 de marzo.

Ya desde hace algunos años venimos planificando el lanzamiento: queríamos hacer coincidir el lanzamiento del disco con el del video, pero no pudimos, porque así se dieron las cosas.

Cuando nos encontrábamos ya pesimistas con su realización (por muchas cuestiones que se encuentran alrededor de hacer un video, ya ni siquiera pensábamos en el asunto), volvíamos luego de un arduo ensayo, con Marcelo y Arpad, al cubículo (casa Quimbando) para tomarnos un mate. Grande, ¡espectacular!, fue la sorpresa que tuvimos cuando abrimos la puerta de la cocina y, sentado en una de las cuatro sillas que tiene nuestra mesa, justo al frente nuestro, estaba un hombre alto y flaco de aspecto alemán: ojos azules, cabello rubio y actitud de “gánster”. Más grande fue la sorpresa cuando este personaje abrió la boca diciendo: “¡cómo están p’s cojudos!” y nuestras mandíbulas repentinamente cedieron ante la gravedad, parecíamos una foto de tres tipos gritando gol en la portada de un deportivo: era el Claus! Hermano Boliviano-Alemán (Boliviano honoris causa).

Insultos amigables, abrazos, mates y ninguna cerveza (¿?) fueron testigos de la felicidad de re-encontrarnos con nuestro hermano.

Empezar las ideas...

Ya nuestro colectivo lo había visto antes que nosotros. Hicimos una reunión en la casa grande (Katari) al día siguiente (para soñar como es habitual). En medio de la charla alguien(ya no recuerdo quién) dijo: “¿y por qué no haces el video de los Quimbando?” y ¡voila! Esa misma noche Claus nos comprometió a pensar en las ideas e imágenes para el video. Charla larga la que tuvimos esa noche: “y que tal si un tipo está corriendo…” o “no, mejor que…”, “buenísimo, así podemos hacer que…”, “…y abre la puerta…”, y cosas por el estilo culminaron una noche inolvidable en la compañía de insultos amigables, abrazos….y ninguna cerveza (¿?).

History Board

Todas esas ideas necesitaban un Story Board, y claro, quién más que Marcelo Montaño (Marce ink le decimos) para hacerlo. Marce es otro hermano que comparte nuestros sueños revolucionarios en el colectivo Katari, y con el cual ya nos conocemos muchos años.

Al día siguiente se juntaron con Claus y otra vez ¡voila! Los dibujos estaban loquísimos así que tuvimos que ver amigos que encajaran en los personajes.

“Que casting ni que mierdas”


Teníamos a los amigos indicados para hacer los papeles, en otras palabras tenemos a los amigos indicados para hacerlo, y ellos son toooodos nuestros amigos.

Y el lugar? Hablamos con Lenin y muy amablemente nos ofreció LA MUELA DEL DIABLO para realizar el primer día de rodaje.

El primer día aparecieron esas caricaturas hechas carne para hacer las primeras tomas, y ellos fueron: El Anteke (Daniel Antezana), El Gaborges (Gabriel Rivero, de espiral), Jana dϋering (la flaca), Hannah Hedetohl (la hana), Daniela Carrasco (la dani), Alejandro Gonzales (de espiral), El Chapulín colorado (Chiristian Escalera: el pianista), Caín Davedrios, todos ellos entraron en cámaras. En el backgroud: La negra (Amalia Canedo), Sergio Tames (El ch’awa), Andrea Barrientos (de espiral) y por último pero no menos importante la Pulginha (Paola Rodriguez).


Más adelante...

Esos fueron los primeros amigos en entrar, quedan aún más, cuando hagamos una de las tomas en Jaihuayco (zona sur) en las que contaremos al menos con 70 personas (el que quiera se acopla a la gran toma). Grober Loredo nos dará una mano importantísima a través de su programa “arte en la llajta”.

Queremos en esta parte agradecer a todos los amigos que participaron del primer día de rodaje y a la “LA MUELA DEL DIABLO antro cultural”, por abrirnos las puertas desde temprano y dejar el boliche en nuestras manos: gracias Lenin y Gaby por toda la buena onda.
Ya estaremos compartiendo con todos ustedes, amables lectores, algunas fotos y bloopers del rodaje.

Salud de yerba mate (¿?)

Abrazos,

Quimbando

*Fotos:
1. Sacada de los tiempos: Quimbando mostrando su nueva producción "Apaguen la luz..."
2.Mauricio Canedo, Claus Reichel, Marcelo Arias, Lenin Butrón y Gabriela Córdova.
3. Todos los participantes del primer día de rodaje. Excepto: Arpad Debreczeni, Jana Duering y Paola Rodriguez.