“Cuídense hijos de puta, porque les vamos a hacer hervir en aceite”. Ese el mensaje -verbal y escrito- transmitido por celular a los telefonos de Quimbando...
La historia de amenazas tiene sus antecedentes hace varios meses, cuando en un evento anual ya tradicional (La fiesta de la música) pusimos en consideración del público el "Apaguen la luz". Al dia siguiente recibimos una llamada telefónica de UNITEL pidiendonos "conversar" ... moderar nuestro canto. En ese momento, ellos habían posado su atención en nosotros; por amigos y conocidos supimos que "estarían siguiendo nuestros pasos hasta . . ."
La historia de amenazas tiene sus antecedentes hace varios meses, cuando en un evento anual ya tradicional (La fiesta de la música) pusimos en consideración del público el "Apaguen la luz". Al dia siguiente recibimos una llamada telefónica de UNITEL pidiendonos "conversar" ... moderar nuestro canto. En ese momento, ellos habían posado su atención en nosotros; por amigos y conocidos supimos que "estarían siguiendo nuestros pasos hasta . . ."
La historia del amedrentamiento escribe un nuevo capítulo cuando Quimbando hace conocer -de manera explicita- su posición frente a los últimos acontecimientos y se alinea con los sectores que vienen empujando los cambios sociales. La jornada de homenaje a los caidos en los enfrentamientos del 11 de enero y la lucha contra el fascismo tiene la activa y pública participación de nuestro grupo...
A la mañana siguiente, nos llaman no ya para conversar y "sugerirnos" moderar nuestro canto, sino para incluirnos en su menu fascista: "Quimbando frito en aceite Rico".
En todo caso las amenazas no nos amedrentan, sino que ratifican nuestra posición frente a la historia y alimentan nuestras convicciones.
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